Casi el 50% de los alumnos de clase pertenecen a la orqueta del colegio. Aquí los vemos posando una vez terminado el ensayo general del pasado jueves. Cada vez que los oigo y los veo, se me liqúan los ojos y los pelos se me erizan. Hay que agradecerles a esos dos magníficos profesionales, Enrique Montaño y Jerónimo Morante, el trabajo generoso y desprendendido que realizan, sin más papeles que las partituras y los instrumentos. Miguel Velasco se une a ellos para que este extenso y complicado grupo humano saque a flote este proyecto aparentemente tan sencillo. Ánimo chavales, y gracias maestros, porque hacéis que este colegio suene muy bien.
Muchas gracias, maestro.
ResponderEliminarLa verdad es que tienes unos niños y unas niñas en la clase que son lo mejor de lo mejor: cantantes, flautistas, percusionistas, violistas, pianistas...de todo. Con niños como éstos da gusto trabajar.
¡A seguir esforzándose para mejorar cada día!
Un saludo